Diego Placente se robó el show con el partido liquidado ante México en los cuartos de final del Mundial Sub 20.
El entrenador de la Selección argentina tuvo un entredicho con su par mexicano, Eduardo Arce.
En la previa, Arce se había quejado de absolutamente todo, hasta de que pusieran a la delegación argentina en el mismo hotel que a México.
Finalmente Placente estalló y mandó a callar al DT mexicano. Acto seguido, pidió revisión de VAR y eso derivó en la expulsión de Diego Ochoa a los 47 minutos del segundo tiempo.
Diego Placente se robó el show con el partido liquidado ante México en los cuartos de final del Mundial Sub 20.
El entrenador de la Selección argentina tuvo un entredicho con su par mexicano, Eduardo Arce, con el partido 2 a 0 y en tiempo de descuento.
En la previa, Arce se había quejado de absolutamente todo, hasta de que pusieran a la delegación argentina en el mismo hotel que a México.
Finalmente Placente estalló y mandó a callar al DT mexicano. Acto seguido, pidió revisión de VAR y eso derivó en la expulsión de Diego Ochoa a los 47 minutos del segundo tiempo.
También pidió el VAR por una agresión de Tahiel Jiménez que vio la roja a los 52, justo antes del pitazo final.
Mateo Silvetti liquidó el partido.
Luego del triunfo por 2-0 frente a México, que significó el regreso de Argentina a las semifinales de un Mundial Sub 20 después de 18 años, Placente fue cauto y autocrítico.
“Nos tocó defender cuando teníamos que defender y jugar con jerarquía cuando teníamos la pelota"
Placente, quien logró devolver al seleccionado juvenil a una instancia que no alcanzaba desde 2007, remarcó la importancia del compromiso colectivo.
“Estos chicos entienden lo que es representar a la Argentina, y eso se nota en la cancha.”