—El traslado del puerto seco es un tema clave para la zona. ¿Cuál es la postura de Aderpe?
—Con la nueva variante en Palmira, el tránsito pesado se desviará fuera de la ciudad, lo que descomprimirá el Rodríguez Peña. El gobierno propone mover el puerto seco al parque de Luján, lo que generará un gran movimiento logístico.
Ese traslado dejará disponibles muchas hectáreas en el corazón de la zona industrial. Por eso, impulsamos junto al municipio un proyecto para crear allí una ciudad empresarial. Sería un espacio de alto nivel de servicios, que pondría en valor la cercanía de esta zona con la capital provincial. A veces los mendocinos no dimensionamos lo estratégico de tener una zona industrial tan próxima. Transformarla puede atraer inversiones que hasta ahora no llegaron.
—¿Qué características tendría esa ciudad empresarial?
—Buscamos que combine servicios, tecnología, logística y espacios comunes para empresas que hoy operan dispersas. Hablamos de un entorno moderno, seguro, bien conectado, con infraestructura de calidad. Sería también un nodo de atracción para industrias limpias, tecnología, formación profesional y vinculación internacional.
Tenemos tierras fiscales, tenemos un diagnóstico claro y el acompañamiento del municipio. Si logramos articular con la provincia y la Nación, podemos concretarlo en el mediano plazo.
—¿Qué factores hacen de Mendoza un lugar atractivo para invertir?
—La calidad de vida, la infraestructura cultural, y un entramado social estable hacen que quien llega a Mendoza quiera quedarse. Si sumamos un Estado provincial organizado y una política clara de acompañamiento a la inversión, el resultado puede ser muy favorable.
Además, estamos en una posición estratégica para exportar, con cercanía a Chile, conectividad aérea y rutas hacia el Atlántico y el Pacífico. Pero necesitamos mejorar esos corredores, y sobre todo pensar en términos regionales, no solo locales.
—Más allá del vino y el petróleo, ¿dónde ves los próximos motores productivos?
—El desarrollo de Vaca Muerta en el sur de la provincia y la puesta en marcha del proyecto minero San Jorge abrirán un nuevo capítulo. Mendoza también fue pionera en energía hidroeléctrica y ahora apuesta fuerte a la energía solar.
En alimentos, estamos viendo un proceso interesante. Mendoza puede pasar de producir materia prima a generar productos elaborados. Si aprovechamos nuestro capital humano, las ventajas logísticas y una mejor articulación entre sectores, podemos generar una nueva matriz productiva que mire al futuro.
Necesitamos integrar industria, educación, infraestructura y planificación. Solo así vamos a recuperar el liderazgo que Mendoza tuvo históricamente en el oeste argentino.