Pese a la estabilidad de precios, las constructoras anticipan igual o menor actividad económica
Las que proyectan una mejora la asocian a la estabilidad de precios y al reinicio de obras públicas, mientras que las que prevén una caída señalan como principales obstáculos los altos costos y la falta de financiamiento.
Menos del 20% de las constructoras prevé un repunte de la actividad. Foto: Freepik
Las grandes empresas constructoras de Argentina, tanto las que se dedican a la obra privada como a la pública, anticipan un escenario de estabilidad en el nivel de actividad para el período que va de mayo a julio de 2025. Así se desprende de la última encuesta cualitativa realizada por el Indec, que muestra que la mayoría de las firmas no espera grandes cambios, e incluso algunas prevén una disminución.
En el ámbito de las obras privadas, un 67,6% de las empresas proyecta que el nivel de actividad se mantendrá igual en los próximos tres meses. Mientras que un 17,6% estima una caída; solo un 14,8% vislumbra un aumento. Las que sí esperan una mejora, señalan como principales motores el crecimiento de la actividad económica y la estabilidad de los precios, ambos mencionados por el 28,9% de estas empresas. Sin embargo, entre las que anticipan una contracción, los altos costos de la construcción (28,9%) y la caída de la actividad económica (27,3%) son las mayores preocupaciones.
Las firmas que apuestan a un crecimiento lo atribuyen al reinicio de obras públicas
Para las empresas dedicadas a la obra pública, la tendencia es similar. El 59,8% cree que la actividad no cambiará en el mismo período, con un 20,6% que prevé una disminución y un 19,6% que espera un incremento. Aquellas que apuestan a un crecimiento lo atribuyen al reinicio de obras públicas (26,7%) y a la estabilidad de los precios (20,0%). Por el contrario, los atrasos en la cadena de pagos (25,4%) y la caída de la actividad económica (22,2%) son las principales razones para quienes vaticinan un descenso.
El pulso del empleo y las obras futuras
En los próximos meses, las empresas de obra privada se enfocarán en montajes industriales (14,5%), edificios comerciales (14,3%) y edificios industriales (13,8%), entre otras. Las firmas de obra pública, por su parte, concentrarán sus esfuerzos en obras viales y de pavimentación (22,7%), otras obras de arquitectura (15,2%) y distribución de agua y cloacas (13,8%).
Los constructores destacaron la estabilidad de precios como uno de los factores determinantes
En cuanto al personal ocupado, la mayoría no espera grandes variaciones. Un 71,0% de las empresas de obra privada y un 67,6% de las de obra pública planean mantener su dotación de personal. No obstante, un porcentaje menor (18,7% en obra privada y 16,7% en obra pública) sí anticipa una reducción de personal.
¿Qué políticas incentivarían al sector?
Tanto las empresas de obra privada como las de obra pública coinciden en que las políticas orientadas a las cargas fiscales (24,2% y 22,4% respectivamente) y a los créditos para la construcción (22,0% y 23,9%) serían clave para incentivar el sector.
En lo que respecta a las necesidades crediticias, el 42,5% de las empresas de obra privada estima que no variarán, mientras que un 39,6% directamente no recurre a créditos. Entre las empresas de obra pública, el 44,0% cree que no habrá cambios, aunque un 29,0% sí prevé un aumento de sus necesidades. El sistema bancario sigue siendo la principal fuente de financiamiento, con un 66,1% de las empresas privadas y un 64,4% de las públicas recurriendo a la banca.