Scott Derrickson, conocido por dirigir "Sinister" y "Doctor Strange", nos trae "El teléfono negro" (The Black Phone), una película de terror psicológico que trasciende los sustos fáciles para explorar miedos más profundos. Estrenada en 2021 y actualmente disponible en Netflix hasta el 2 de junio, esta adaptación de un relato corto de Joe Hill (hijo de Stephen King) combina el suspenso del crimen real con elementos sobrenaturales.
La trama se desarrolla a fines de los años 70 en un suburbio de Denver, en medio de una ola de desapariciones de niños. El protagonista es Finney (Mason Thames), un chico tímido que lidia con matones y un padre alcohólico. Su única aliada es su hermana Gwen (Madeleine McGraw), quien posee sueños premonitorios. La vida de Finney da un giro aterrador cuando es secuestrado por "El Raptor", un enigmático personaje que aterroriza la ciudad.

Finney despierta en un sótano insonorizado con un viejo teléfono negro que, inexplicablemente, comienza a sonar. Las voces de las víctimas anteriores de "El Raptor" lo guían, advierten y empujan a luchar por su supervivencia. La película se convierte en una hábil mezcla de terror sobrenatural y drama de supervivencia. El guion, coescrito por Derrickson y C. Robert Cargill, se toma su tiempo para desarrollar la tensión y dar profundidad a los personajes. Finney no es un héroel, sino un niño común enfrentando una situación extraordinaria, mientras que Gwen, con sus visiones, se vuelve crucial para el desarrollo de la historia desde el exterior.
Una actuación destacada es la de Ethan Hawke como "El Raptor". Su interpretación rompe con sus papeles anteriores, entregando un personaje inquietante e impredecible, cuya monstruosidad resulta escalofriante. Su máscara, inspirada en diseños de Tom Savini, cambia de forma según el estado de ánimo del personaje, contribuyendo a una de las actuaciones más impactantes de su carrera.
"El teléfono negro" fue aclamada por la crítica en su estreno, elogiada por ofrecer una propuesta fresca dentro del cine de terror comercial. Recaudó más de 160 millones de dólares en taquilla, consolidando a Scott Derrickson como un referente en el género. Si aún no la has visto, te recomendamos apurarte antes de que deje la plataforma de Netflix.