El Teatro Lola Membrives vivió una noche mágica este miércoles, cuando el público y el elenco de la obra Rocky recibieron una visita inesperada. Mientras transcurría la función protagonizada por Nicolás Vázquez, Lionel Messi, el ídolo máximo del fútbol, se encontraba entre los espectadores. La presencia del astro del fútbol se mantuvo en estricto secreto hasta que la función terminó.
Acompañado por su familia —sus padres Celia y Jorge, sus hermanos Matías y Rodrigo, y sus sobrinos—, Messi se levantó de su asiento entre aplausos y fue entonces cuando la multitud lo reconoció. La sorpresa se transformó en una ovación cerrada y vibrante, un homenaje espontáneo a uno de los deportistas más influyentes del mundo.
Después de la función, Messi se dirigió al camarín para hablar a solas con Nicolás Vázquez. La visita se dio en la previa del próximo compromiso de la Selección argentina, que jugará este jueves frente a Venezuela.