El Gobierno de Brasil anunció que parte de los alimentos originalmente destinados a la exportación hacia Estados Unidosse destinarán a programas sociales dentro del país, como respuesta al reciente aumento arancelario decretado por Washington.
La medida fue detallada por el ministro de Desarrollo y Asistencia Social, Familia y Combate al Hambre, Wellington Dias, durante el programa “Bom día, ministro”, transmitido por el Canal Gov. Dias explicó que el objetivo es proteger a los pequeños productores y garantizar la seguridad alimentaria de los sectores más vulnerables de la población.
En concreto, el Estado comprará productos perecederos como frutas, pescado y asaí, que estaban destinados al mercado estadounidense, para distribuirlos entre instituciones de acogida social, comedores escolares y organizaciones que atienden a personas con discapacidad.
Esta iniciativa forma parte de una estrategia más amplia del Ejecutivo para amortiguar el impacto del arancel del 50 % impuesto por Estados Unidos, que afecta a cerca del 35 % de las exportaciones brasileñas a ese país. Días también destacó la articulación entre su cartera y otros organismos como el Ministerio de Desarrollo Agrario, la Compañía Nacional de Abastecimiento (Conab) y el Ministerio de Agricultura y Ganadería, para implementar esta política de absorción interna de alimentos.
Actualmente, la red de asistencia social brasileña cuenta con unas 34.000 unidades de acogida para niños, personas mayores y personas con discapacidad, donde serán distribuidos estos productos.
Luiz Inácio Lula da Silva
El ministro subrayó además que esta estrategia no se limita al mercado doméstico. El Gobierno también trabaja en la apertura de nuevos destinos internacionales para los productos que han perdido acceso o competitividad en Estados Unidos.
“Vamos a seguir adelante, buscando otros mercados también. Mi estado (Piauí) ya está buscando nuevos compradores para la miel, y estoy seguro de que hay demanda en otros países”, afirmó.
En paralelo a las medidas económicas, Días reafirmó el compromiso de Brasil con la vía diplomática para resolver el conflicto comercial con Estados Unidos.
El Gobierno brasileño criticó la medida, e inició relaciones diplomáticas y comerciales en respuesta, incluyendo compras públicas y la diversificación de acciones de mercados internacionales.
Mientras tanto, el ministro de Puertos y Aeropuertos, Márcio França, anunció que el Gobierno evaluará subsidios para que los pequeños productores afectados por las tarifas puedan colocar sus productos en el mercado interno, compensando así las pérdidas provocadas por el nuevo arancel.