La carta de intención firmada entre los gobiernos de Donald Trump y Javier Milei por el que se inició el proceso para que los ciudadanos argentinos vuelvan a entrar sin visa a los Estados Unidos por turismo o negocios, como lo hicieron entre 1996 y 2002, tiene un punto altamente sensible. Y Washington lo tiene en la mira.
Este tiene que ver con el otorgamiento de la ciudadanía argentina a los extranjeros y con la adquisición del documento de identidad y el pasaporte nacional -estos los da el Renaper- y que les otorgará el derecho de acceder al llamado Visa Waiver Program, que la agencias estadounidenses controlarán. Desde los atentados a las Torres Gemelas y el Pentágono del 9 de septiembre de 2001, para Estados Unidos la Inmigración, las fronteras, y otras cuestiones son asuntos de seguridad interior. Y el turismo es controlado como tal. Las lleva el llamado Homeland Security.

Altas fuentes consultadas tras la firma, el lunes, de la carta de intención entre Kristi Noem, precisamente la secretaria de Seguridad Interior y Javier Milei con sus ministros Patricia Bullrich (Seguridad) y Gerardo Werthein (Exteriores) , confiaron a Clarín que una de las preocupaciones es que, así como en los años noventa hubo ciudadanos asiáticos y latinoamericanos que buscaron ser argentinos sólo para irse a EE.UU. por el waiver con sus pasaportes argentinos, ahora se ven nuevos fenómenos que estresan la legislación, que por cierto es más restrictiva desde mayo pasado. Ciudadanos rusos y ucranianos que huyen de la guerra, también venezolanos y otros latinoamericanos como bolivianos cuyo países tiene acuerdos migratorios flexibles con la República Islámica de Irán están en observación.
Por eso, no deja de ser llamativo el hecho de que, a tres días de que se firmara el acuerdo con Noem, el Gobierno reglamentara el procedimiento que debían seguir los extranjeros que busquen obtener la ciudadanía argentina a través de una inversión considerada “relevante”. El Decreto 524/2025 de este jueves habla de "ciudadano por inversión".
Nada de esto exime de que los ciudadanos nacidos en el territorio nacional constituyan un riesgo seguridad como la concibe Estados Unidos. Sin embargo, la cuestión de los extranjeros es un aspecto central no sólo en la narrativa sino en los hechos y en el control de los ilícitos a nivel transnacional. Actos de terrorismo, narcotráfico, trata, y numerosos otros ilícitos requieren de la adquisición de pasaportes que permitan la circulación por una amplia gama de países.

A lo largo de toda la visita de Noem participaron el canciller Gerardo Werthein -cuyo ministerio debe informar todavía la letra chica del waiver, que aún no se conoce- y el vicejefe de Gabinete del Interior, Lisandro Catalán, que depende del jefe de ministros, Guillermo Francos, donde orbitan el control de la concesión de ciudadanía, ahora y la entrega de los documentos.
En su estancia en la Argentina -que incluyó una cabalgata, un baile folclórico y un asado con Bullrich en la montada de Campo de Mayo- Noem firmó dos acuerdos más, que son complementarios al de visa waiver que rubricó Werthein. Por un lado, el de verificación electrónica de nacionalidad en Argentina, que, entre otras cuestiones, agilizaría la detección y deportación de ciudadanos argentinos sin estatus legal en Estados Unidos -incluso una vez que tengan el waiver no pueden quedarse legalmente en ese país más allá de los 90 días-; y otro, sobre Control de Fugitivos que facilitará el intercambio de antecedentes penales entre ambos países no sólo con fines de expulsión sino de encarcelamientos.
La reforma migratoria que Milei impuso en mayo por decreto presidencial ya dificulta el trámite de ciudadanía por naturalización (de los extranjeros) que pasará de la Justicia Federal a la Administración Nacional de Migraciones que depende Interior precisamente . Se modificaron precisamente los supuestos de acceso al beneficio, y podrán acceder a ella extranjeros con residencia legal y efectiva en la Argentina por un plazo mínimo de dos años, incluso a aquellos que realizaron una inversión en el país.
El Gobierno anunció además la creación de una agencia en la órbita del Ministerio de Economía para evaluar los supuestos de inversión y evaluar las solicitudes con intervención de la Dirección Nacional de Migraciones.
También modificaron el Régimen de Admisión. Por ejemplo, la reunificación familiar ya no será causal de acceso directo a la residencia permanente (pasa a ser temporario, debe ser reglamentado). El acceso a la residencia permanente será por arraigo (haber residido en forma temporaria por un plazo de entre 2 y 4 años, debe ser reglamentado)
Se estableció la obligación de acreditar medios económicos de subsistencia para acceder a la residencia permanente.