Educación
Pruebas Aprender: en lectura, el Gobierno festeja y expertos cuestionan
La Dirección General de Escuela considera que el 71,% de los estudiantes de tercer grado alcanzaron un nivel satisfactorio, pero el dudoso el porcentaje para los que se dedican a analizar los datos y entienden que falta mejorar la comprensión.Para el Gobierno, el 71,6% de los estudiantes de tercer grado alcanza niveles “satisfactorios” de lectura debido a que llegan al Nivel III el 27,5% de los alumnos, son los que logran comprender textos complejos de forma literal y se están iniciando en la lectura inferencial y reflexiva. Alcanza el Nivel IV el 27,2%, estos comprenden textos complejos de forma literal, inferencial y reflexiva. También están los que llegaron al nivel V, el 16,9% de los alumnos, que pueden comprender textos complejos de forma literal, inferencial y reflexiva y establecen inferencias complejas, según indica el resultado de las pruebas Aprender realizadas por la Secretaría de Educación de la Nación.
Por el otro lado, el 28,3% de los estudiantes de tercer grado tiene dificultades. El 1,8% son lectores incipientes, es decir que lee palabras con apoyo de imágenes y se está iniciando en la lectura de enunciados breves. En el Nivel I (6%), están los que se inician en la lectura de textos simples; mientras que el 20,5% está en el Nivel II (20,5%) los que comprenden textos simples pudiendo identificar mayormente información literal.
Desde el gobierno escolar, Romina Durán, directora de Evaluación de la Calidad Educativa, explicó que al cierre del año pasado el 8% de los estudiantes que se iniciaba en la lectura estaba en niveles críticos. También el 71,6% de los estudiantes comprendían textos complejos con diferente grado de profundidad y otro 20% comprendía textos simples. Indicó además que es la primera vez que se hace la prueba Aprender sólo en tercer grado, "esta evaluación y no la podemos comparar, pero sí podemos con nuestras evaluaciones de comprensión lectora y va en sintonía con esos datos. Vemos también cómo nos posicionamos con otras provincias porque el censo de fluidez lectora sólo se hace en Mendoza. Estamos dentro de las 8 jurisdicciones con menos estudiantes críticos, muy por debajo de otras que tienen hasta 17%. Con los que comprenden textos complejos estamos dentro de los 10 mejores y por encima del promedio nacional”.

Durán destaca que en Mendoza hay un Plan Estratégico de Alfabetización con la ley 9438 para que las pruebas e incentivos en la lectura no se limite a los primeros años de la primaria, si no que sea transversal en el sistema educativo. Afirmó que acompañamos con formación docente y también a los estudiantes que tienen problemas. Explicó que la primera medición la hacen en abril, luego hacen otra a mitad de año y otra al final en la que vemos que bajan los alumnos en estado crítico. En tercer grado en abril del año pasado el 20% estaba en estado crítico y cerramos con el 7%. Medimos así desde la primera infancia, hasta el nivel superior con formación docente.
La funcionaria entiende que hay que seguir reforzando las acciones para lograr más comprensión, “que entiendan lo que leen, que las acciones se direccionen al proceso de lectura y que se trasladen a las demás áreas de aprendizaje”.
Qué dicen los expertos
Pero que el 71,6% de los alumnos tenga nivel satisfactorio es la interpretación oficial. Están los que consideran que el Nivel 3 indica que el chico lee mecánicamente, es decir que no entiende lo que lee, por lo tanto no puede considerarse satisfactorio.
La analista de datos de Argentinos por la Educación, Sol Alzú, considera que el equivalente por conocimientos a “satisfactorio y avanzado” del 2016 vendría a ser el nivel IV y V. Así las cosas los números cambian y entonces el 44% de los alumnos tiene un nivel satisfactorio y el resto no llega a ese estado en la lectura.
Superada esta interpretación, queda claro que Mendoza es la séptima jurisdicción con menor porcentaje de estudiantes con alumnos por debajo del Nivel II. Alzú destacó que nuestra provincia tiene 7,8% de estudiantes por debajo del Nivel II, lo que representa a aquellos que tienen serias dificultades para comprender textos simples. Este número está por debajo del promedio nacional que es 11,6%. A su vez, tiene un 1,8% de estudiantes en el nivel incipiente, es decir, estudiantes que leen palabras con apoyo de imágenes y se están iniciando en la lectura de enunciados breves. Esta cifra también es menor que el promedio nacional de 3,3%.
Los expertos en educación señalan que a las provincias que están bien son las que en tercer grado, los chicos pueden lograr comprensión y niveles de inferencia en porcentajes importantes. Aclaran que la fluidez lectora mide la literalidad pero no si entiende. Mendoza pudo mejorar los niveles de chicos en estado crítico, pero le falta mejorar para que haya más chicos que entienden lo que leen como CABA, La Pampa y Formosa.
Algunos entienden que hay que hacer más hincapié en la focalización de los aprendizajes, esto es cuánto tiempo en la escuela está el chico aprendiendo a leer y escribir. En Mendoza, en tercer grado ya lleva cuatro de escolaridad, entonces en ese tiempo deberían haber tenido avances más importantes en la comprensión de la lectura y destacan que en estos chicos de tercer grado no tuvieron el proceso de alfabetización en pandemia.
Plantean también que deberían incluir acciones relacionadas a la alfabetización en todas las materias de primer grado como música por ejemplo, que les facilitaría la conciencia fonológica. Se ha hecho bastante por focalizar pero deben hacerse más, debe ser sistémico y también trabajar más la inferencia y comprensión, eso impactará también en mejores niveles en matemática.
El ejemplo de Sobral
Sobral forma parte del Estado de Ceará en Brasil. En 2000 sólo el 49 % de los estudiantes que a los 7 años terminaban segundo grado estaban alfabetizados; en 2004 este porcentaje había subido al 92%, indica un informe de la desaparecida revista digital RedAcción. Lo lograron a través de la decisión política de mejorar la calidad de la educación y así fue como implementaron programas para capacitar y motivar a los docentes, y se aseguró que estuvieran calificados y comprometidos con la enseñanza de alto nivel. El modelo fue tan exitoso que se impuso en distintos lugares de Brasil y de Latinoamérica. En Mendoza han visto la experiencia brasileña.
“También se estableció un sistema de evaluación riguroso para medir el desempeño de los estudiantes y las escuelas. Esto permitió identificar áreas de mejora y brindar apoyo adicional a los estudiantes que lo necesitaban. Además, se implementaron estrategias de seguimiento, para asegurar que los alumnos estuvieran alcanzando los objetivos educativos”.
Sobral invirtió en la mejora de la infraestructura escolar, construyeron y renovaron escuelas, las equiparon, compraron computadoras sin dejar de atender la alimentación escolar, el transporte escolar, les dieron uniformes y útiles.
Jugaron fuerte al implementar el programa de tiempo completo en todas las escuelas municipales, lo que permitió ampliar las horas de aprendizaje de los estudiantes. Además de las asignaturas básicas, se incluyeron actividades extracurriculares, deportes y artes, brindando una educación más integral.
También se fomentó la participación activa de la comunidad en el proceso educativo. Se establecieron alianzas con organizaciones locales, empresas y familias, que promovieron la corresponsabilidad en la educación, donde alumnos, padres, maestros y directores asumen un rol activo y comparten aprendizajes y responsabilidades.
El compromiso de la escuela se tradujo en que todos los días el director de la escuela pasa por las aulas para saber quién estuvo ausente y así ayudar para que el niño no falte. Si la familia no tiene teléfono, un empleado de la escuela va a los hogares a hablar de la importancia de la presencia diaria de los chicos en la escuela.
Qué dijo el Banco Mundial
Técnicos del Banco Mundial analizaron el modelo de Sobral y lo sintetizaron en estas 8 acciones de acción y pedagógicas:
- - Los líderes y gestores educativos asumen funciones porque tienen las habilidades y competencias necesarias para su mejor desempeño, y no por lazos políticos partidistas.
- - Evaluaciones diagnósticas, formativas y sistemáticas del aprendizaje.
- - Permanente formación docente y de directivos de escuelas.
- - Producción y distribución de material didáctico a todos los estudiantes y profesores.
- - Implementación del servicios de seguimiento y monitoreo de las actividades.
- - Creación de un programa de incentivos para maestros y administradores escolares.
- - Comunicación y movilización por el diálogo y la participación.
- - Institucionalización (integración y consolidación de prácticas educativas específicas dentro de las escuelas y la comunidad).