El consumo masivo en Argentina mostró una variación positiva del 5,5% en mayo respecto al año anterior, consolidando un tercer mes consecutivo de crecimiento y alcanzando un acumulado del 0,6% en lo que va del año. Un estudio privado de la consultora Scentia atribuye esta mejora a la notable performance de los comercios de cercanía, las farmacias y el comercio electrónico, que lograron compensar la persistente retracción de supermercados y mayoristas.
Osvaldo del Río, director de Scentia, enfatizó la importancia de contextualizar este "brote" como parte de un proceso de recuperación, dado que 2024 fue un año de significativa contracción para el consumo. En el análisis por canales, los supermercados se contrajeron un 3,3% en mayo (acumulando una caída del 5,4%), y los mayoristas descendieron un 6,2% interanual en mayo (con una baja acumulada del 4,4%). La suma de ambos canales tradicionales se mantiene en negativo (-0,9%), revirtiendo un breve cambio de tendencia positivo en abril.
En contraste, los autoservicios independientes sumaron su segundo mes positivo con un incremento del 1,5% en mayo. Las farmacias continúan su senda de crecimiento, con un 8,4% interanual en mayo y un sólido 6,9% de acumulado anual. El comercio electrónico retomó su expansión con un +11,4% en mayo, acumulando un +7,2% hasta el quinto mes del año. Otro canal de cercanía, kioscos y almacenes, mantiene un crecimiento de doble dígito, con un +16,1% en mayo y rozando los 10 puntos positivos en el acumulado anual.
Del Río sugirió que la explicación a estos resultados dispares reside en la "racionalidad y cercanía" que buscan los consumidores para comprar pocas unidades y controlar el gasto. Asimismo, la tendencia a la baja de la inflación comienza a brindar "referencias de precios", lo que facilita la decisión y elección del lugar de abastecimiento, impulsando el resurgimiento del consumo masivo en formatos más pequeños y accesibles.