El primer ministro británico, Keir Starmer, anunció el viernes que la identificación digital será obligatoria para que los británicos trabajen en el país, como parte de los planes para combatir la inmigración ilegal.
“Una frontera segura y una migración controlada son exigencias razonables”, declaró Starmer en la Conferencia Global de Acción Progresista en Londres, a la que asistieron políticos como el primer ministro australiano, Anthony Albanese, y el primer ministro canadiense, Mark Carney.
“La identificación digital representa una enorme oportunidad para el Reino Unido. Dificultará el trabajo ilegal en este país, lo que hará que nuestras fronteras sean más seguras”, añadió.

La nueva identificación digital se guardará en los teléfonos inteligentes de las personas y será obligatoria como medio para demostrar el derecho a trabajar en Gran Bretaña al final del periodo parlamentario, previsto para 2029 a más tardar, según Downing Street.
La consulta durará tres meses y la legislación se presentará al Parlamento británico a principios del próximo año. Sin embargo, los críticos argumentan que el nuevo sistema no impedirá que las personas crucen el Canal de la Mancha en pequeñas embarcaciones.
La secretaria conservadora de Trabajo y Pensiones, Helen Whately, afirmó que esto resultará en “más trámites burocráticos” para empleadores y personas que cumplen la ley, mientras que “el trabajo ilegal simplemente continuará”.
La inmigración ilegal es uno de los problemas más difíciles que enfrenta el gobierno británico, lo que ha provocado una ola de protestas en todo el país desde el verano de este año.
El partido de derecha Reform UK ha liderado las encuestas de opinión durante varios meses. Starmer sugirió que afrontar el desafío de la reforma sería un tema central en la conferencia anual del Partido Laborista la próxima semana.
Más de 30.000 personas han cruzado el Canal de la Mancha en pequeñas embarcaciones en lo que va de año, según datos del Ministerio del Interior.