La sucesora de Patricia Bullrich en el Ministerio de Seguridad aseguró que no habrá cambios de rumbo en la gestión y definió el control de fronteras y la Hidrovía como los ejes estratégicos para los próximos dos años.
A poco más de dos semanas de haber asumido la titularidad de la cartera de Seguridad, Alejandra Monteoliva despejó cualquier duda sobre el rumbo que tomará su gestión. En declaraciones radiales, la funcionaria fue contundente al afirmar que la “Doctrina Bullrich” —basada en el orden público y el combate directo al crimen organizado— es el pilar central de su administración.
Una transición sin fisuras Monteoliva, quien se desempeñó como secretaria de Seguridad bajo el mando de Bullrich, calificó el traspaso de mando como una transición "sin el más mínimo traumatismo". Según la ministra, la estructura del ministerio se mantiene prácticamente intacta:
- Continuidad de equipos: Los cambios en el personal fueron mínimos, limitándose a quienes acompañaron a Bullrich al Senado.
- Marco jurídico: Destacó que en los últimos dos años se construyó el andamiaje institucional necesario para que las fuerzas operen con respaldo legal.
- Sincronía operativa: Aseguró que existe una "gimnasia" de trabajo ya establecida que garantiza que no haya vacíos en la seguridad nacional.
Prioridades estratégicas y experiencia en territorio
De cara a la segunda mitad del mandato, la ministra identificó tres puntos geográficos críticos donde se intensificará la presencia estatal: las fronteras, la Hidrovía y el corredor bioceánico. Para Monteoliva, la complejidad actual del crimen organizado exige una actualización constante de las fuerzas policiales, ya que las organizaciones criminales han mutado significativamente en la última década.
Finalmente, la funcionaria apeló a su trayectoria personal para validar su perfil, recordando sus 19 años de experiencia en Colombia durante las épocas más crudas del narcoterrorismo y los secuestros masivos. “Nunca fui una funcionaria de escritorio”, sentenció, subrayando que su gestión mantendrá una fuerte impronta territorial y operativa.