El Gobierno de Mendoza avanza en el tratamiento de la Ley de Presupuesto 2026, tras concluir esta semana las exposiciones de ministros y funcionarios ante la comisión de Hacienda de Diputados. El proyecto contempla un gasto total cercano a los $5 billones, de los cuales el 25% estará destinado al superministerio de Educación, Cultura, Infancias y DGE, conducido por Tadeo García Zalazar. Además, se prevé una inversión pública de $500 mil millones vinculada al Fondo del Resarcimiento, que busca alcanzar el 15% del total presupuestado.
Uno de los puntos más conflictivos es el pedido de autorización para el uso del “roll over”, mecanismo de refinanciamiento de deuda que este año asciende a $350 mil millones. A esto se suma una solicitud de $240 mil millones para obras de transporte como el Metrotranvía y el Tren de Cercanías. Aunque algunos intendentes opositores respaldan estas iniciativas, el Ejecutivo necesita el apoyo de dos tercios de ambas cámaras para avanzar. Desde el radicalismo estiman que el proyecto podría llegar al recinto de Diputados en una o dos semanas, una vez finalizadas las elecciones.
El Gobierno mendocino continúa con los debates en torno a la Ley de Presupuesto 2026 y ya planifica cuándo podría llegar el proyecto al recinto de Diputados.
Este lunes finalizaron las visitas de ministros y funcionarios de los diferentes estamentos del Estado a la comisión de Hacienda y Presupuesto de la Cámara Baja. Así, se concretaron las habituales presentaciones en las que se detalla la proyección de gastos de cada una de las áreas.
Así, quien se llevará la mayor tajada de la pauta será el super ministerio que conduce Tadeo García Zalazar, es decir, el de Educación, Cultura, Infancias y DGE. Ese conglomerado de sectores concentrará el 25% del total.
Se trata de alrededor de $1,6 billones de una cifra que asciende a cerca de $5 billones para toda la “ley de leyes”.
Mientras tanto, el Ejecutivo también incluyó en el ítem de “inversión pública” aproximadamente $500 mil millones que corresponden al Fondo del Resarcimiento, con el objetivo de que ese apartado llegue a casi el 15% del total.
El ministerio que conduce Tadeo García Zalazar se lleva el 25% del Presupuesto.
Roll over, el punto conflictivo
Sucede todos los años y esta vez no iba a ser la excepción: el principal conflicto entre el oficialismo y la oposición es el uso del “roll over”.
El mecanismo apunta al refinanciamiento de deudas de ejercicios anteriores, y esta vez llegará a un pedido por el “rolleo” de $350 mil millones.
El objetivo es mejorar el perfil de vencimientos de los créditos y, por otra parte, también se busca solicitar $240 mil millones para la ampliación del Metrotranvía y el Tren de Cercanías.
Lo que genera más ruido es, justamente, el modo de utilización del “roll over”, ya que varios algunos intendentes de otros partidos no oficialistas se verían beneficiados por las obras de transporte y no pondrían reparos en la toma de esa deuda.
Para esto, el Gobierno necesita reunir el apoyo de dos tercios de cada cámara parlamentaria y, por esto, debe conseguir votos de parte de la oposición.
En ese proceso se embarcará en los próximos días, y desde el radicalismo calculan que en “una o dos semanas”, luego de las elecciones, la iniciativa podría llegar al recinto de Diputados para poder ser discutida.